El videoartista norteamericano Bill Viola (Nueva York, 1951), el más reconocido, laureado y cotizado en todo el mundo, ha adoptado el agua como una de las claves fundamentales en su obra. En este artículo se analiza una selección de sus piezas en las que este elemento forma parte, su significado y el papel que juega en el proceso artístico. También se incluyen algunas de las creaciones más referencialmente medioambientales durante el período analizado (1972-2002), que se corresponde con sus treinta años de trayectoria, hasta su puesta en escena más emblemática: Las Pasiones (2003).